La compasión, palabra en hebreo “rakhamim”. 

Esta palabra se vuelve tan importante y fuerte al meditar en ella, la compasión, ese amor que tiene una madre hacia sus hijos vulnerables, ese apego que tiene un padre hacia sus hijos que lo necesitan, ese aprecio que tiene una persona hacia un amigo muy querido, ese sentimiento de ayuda al prójimo, el no pensar solo en uno mismo, sino que velar por las necesidades de otros. 

(1)  The Bible Project en el vídeo “Compasión” comenta: “la compasión en la Biblia hebrea está centrada en la esencia de una persona, y esta palabra nos invita a imaginarnos los sentimientos tiernos de una madre hacia su infante vulnerable”. 

Éxodo 34:6 nos da una descripción de nuestro Padre Celestial: “Dios clemente y compasivo, lento para la ira y grande en amor y fidelidad”. 

En la Biblia podemos encontrar distintos sucesos en los cuales Jesús nos demuestra su carácter compasivo con el prójimo sin esperar nada a cambio. “Jesús recorría todos los pueblos y aldeas enseñando en las sinagogas, anunciando las buenas nuevas del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia. Al ver a las multitudes, tuvo compasión de ellas, porque estaban agobiadas y desamparadas, como ovejas sin pastor” Mateo 9:35-36

Quiero invitarte a reflexionar en lo siguiente: 

1.     Estás de compras en el supermercado y ves a unos padres con un hijo que tiene discapacidad y en un abrir y cerrar de ojos el niño se va corriendo y los padres tienen que dejar su carreta con todas sus compras por seguir a su hijo. 

¿Estarías dispuesto a ser compasivo y tomarte la molestia de cuidar su carreta con sus compras mientras ellos alcanzan a su hijo y tratan de calmarlo? O simplemente sigues de largo sin “haber visto nada” y pensar “es problema de ellos”. 

2.     Es domingo, te encuentras en tu iglesia y ves llegar a unos padres con un hijo con discapacidad quienes tienen hambre y sed del evangelio, como todos lo tenemos, y necesitan recibir de la palabra, pero tienen miedo de dejar a su hijo en la escuela dominical porque no saben si podrían atenderlo en base a sus necesidades. 

¿Estarías dispuesto a acercarte a los padres, conocerlos y conocer a su hijo? Preguntarles, “¿cómo podemos ayudar?” “¿qué necesita su hijo?”, y tomar la decisión de cada domingo atenderlo y adaptar la escuela dominical con base en las necesidades del niño para que ellos puedan estar en el servicio tranquilamente.  

Demostrando compasión a padres de hijos con discapacidad

“Cada uno debe velar no solo por sus propios intereses, sino también por los intereses de los demás” Filipenses 2:4 

Reconozco que a veces es difícil velar por otros, nos acomodamos tanto a nuestros propios afanes y a resolver nuestras situaciones sin pensar que el atender y responder por otros nos ayuda a crecer como cristianos y a ser más compasivos como lo fue Jesús. 

En 3 de Juan 5-6 Gayo nos demuestra una actitud de compasión hacia el prójimo aun sin conocerlos, “Querido hermano, te comportas fielmente en todo lo que haces por los hermanos, aunque no los conozcas. Delante de la iglesia ellos han dado testimonio de tu amor”. (2) Frank Thielman comenta sobre esto, “El anciano toma la generosidad de Gayo como precisamente la clase de ayuda práctica a los hermanos necesitados que el Anciano elogia en 1 Juan como la misma definición del amor (1 Jn 3:16). Es la prueba práctica de si «pertenecemos a la verdad» o no (3:19; 1:6). «Si alguien que posee bienes materiales ve que su hermano está pasando necesidad, y no tiene compasión de él», dice el Anciano, «¿cómo se puede decir que el amor de Dios habita en él?» (3:17). O, para decir el principio en forma positiva: «Nosotros sabemos que hemos pasado de la muerte a la vida porque amamos a nuestros hermanos» (3:14). Esto es similar a la afirmación de Jesús en el Evangelio de Juan de que el amor de los discípulos unos a otros demuestra la validez de su discipulado (Jn 13:35). La disposición de Gayo de mostrar hospitalidad a cristianos no conocidos, pero teológicamente sanos es evidencia creíble de que posee la verdad (3 Jn 3)”.

El contexto, en este caso, es ayudar a misioneros brindándoles hospitalidad, pero nos enseña que la compasión debe siempre extenderse a nuestros hermanos en Cristo y de cómo esta es una muestra de nuestra fidelidad a Dios. 

Te preguntarás, “¿cómo podría demostrar esa compasión hacia padres de hijos con discapacidad?”, “¿qué puedo hacer yo si no conozco nada acerca del tema?”; sé que da miedo pensar en ayudar, pero podemos realizar acciones pequeñas que hacen una gran diferencia: 

1.     Comienza evitando hacer preguntas imprudentes, “¿por qué el niño tiene eso?”, “¿de quién proviene la discapacidad, de papá o mamá?”, “¿no te cuidaste durante el embarazo?” …y muchas preguntas más que pueden dañar tanto a los padres y provocar un escaso contacto social a causa del miedo de ser juzgados por otros. 

2.     Preocúpate por conocer la discapacidad de su hijo, “¿en qué consiste la discapacidad de tu hijo, cómo podemos acercarnos a él para conocerlo?”, “¿en qué podemos ayudarles a ustedes?”, es importante demostrar interés y que los padres perciban que quieren ayudarles. 

3.     Escúchalos, no todos los días son fáciles. Los padres necesitan desahogarse y poder hablar con alguien de confianza que ore junto con ellos, que llore junto con ellos, que a pesar de no entender su dolor o preocupación busquen soluciones juntos conviviendo en armonía. 

No conocemos el temor, cansancio o necesidad de los padres que tienen un hijo con discapacidad, pero podemos demostrarles un amor genuino que les permita abrirse y confiar en que hay personas que se preocupan por ellos y están dispuestos a velar por sus situaciones; y lo más importante darles a conocer que no están solos y que tienen una comunidad en quien respaldarse y buscar refugio. 

“¡Cuán bueno y cuán agradable es que los hermanos convivan en armonía!” Salmo 133:1

Reflejar el carácter de Cristo

“La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús, quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la naturaleza de siervo y haciéndose semejante a los seres humanos”. Filipenses 2:5-7

La falta de compasión no debe caracterizar a la iglesia de Cristo, como cuerpo debemos de desbordar compasión, amor, armonía y humildad como Jesús lo hizo al venir a este mundo a morir por nuestros pecados. 

Quisiera recordar el suceso en donde Jesús lava los pies a sus discípulos y les menciona los siguiente: 

“¿Entienden lo que he hecho con ustedes? Ustedes me llaman Maestro y Señor, y dicen bien, porque lo soy. Pues, si yo, el Señor y el Maestro, les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse los pies los unos a los otros. Les he puesto el ejemplo, para que hagan lo mismo que yo he hecho con ustedes. Ciertamente les aseguro que ningún siervo es más que su amo, y ningún mensajero es más que el que lo envió. ¿Entienden esto? Dichosos serán si lo ponen en práctica”. Juan 13: 12-17

A padres de hijos con discapacidad 

Padres, les pido perdón si en algún momento se les ha dañado y si un hermano en Cristo se ha equivocado con ustedes. Anhelo que puedan tener una comunidad en donde puedan sentirse amados y que sea un refugio para ustedes. Son importantes y amados y sus hijos también lo son. Reconocemos su arduo trabajo, admiramos su paciencia constante, su amor desbordante, su dedicación, el cuidado que tienen y su lucha constante por hacer que su hijo/a salga adelante. Su trabajo es admirable y lo están haciendo bien. 

Tienen una familia no solo de sangre, sino una familia en Cristo. No están solos. 

Oración

Padre, ayúdanos a seguir tus pasos y a reconocer que como humanos tendemos a cometer muchos errores, a ser orgullosos y olvidarnos de los demás. Anhelamos poder imitarte y rebajarnos todos los días como tú lo hiciste al venir a este mundo. Queremos ser de apoyo para esos padres que lo necesitan y ser una comunidad en la cual ellos puedan recostarse y sentirse parte. Reconocemos que todas tus obras son maravillosas, recuérdanos cada día el amor que tú has tenido y tienes hacia nosotros y que podamos reflejarlo con los demás. 

Te pido por los padres de hijos con discapacidad, que sigas dándoles esa fortaleza que necesitan, te doy gracias por sus corazones, gracias por que son padres que luchan por sus hijos, que tienen una paciencia, bondad, dedicación y compasión admirable. Anhelo que puedan encontrar una comunidad en donde puedan refugiarse y sentirse amados tanto ellos como sus hijos. 

¡Gracias por demostrarnos acerca de la compasión con tu carácter y porque tú siempre has sido compasivo con nosotros!

Amén. 

 

BibleProject – Español. (2021,28 septiembre). Compasión. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=55Jp07kZLtI

Thielman, Frank. (2005). Libro Teología del Nuevo Testamento. Vida.